En Métricas te queremos ayudar a impulsar el crecimiento de tu empresa u organización
Contáctanos para solicitar mayor información sobre nuestros servicios y soluciones para ayudarte a hacer crecer tu organización.
Contactar
El Régimen Simplificado de Confianza (RESICO) representa una oportunidad única para personas físicas y morales que buscan simplificar sus obligaciones fiscales en México. Este esquema tributario ofrece ventajas significativas para contribuyentes con ingresos moderados, permitiendo una gestión más eficiente de sus responsabilidades ante el SAT.
El RESICO es un régimen fiscal introducido por el SAT que permite a ciertos contribuyentes cumplir con sus obligaciones tributarias de manera simplificada. Este sistema reduce la complejidad administrativa y ofrece tasas preferenciales de Impuesto Sobre la Renta (ISR) para quienes califican.
Este régimen fue diseñado específicamente para facilitar el cumplimiento fiscal de pequeños y medianos contribuyentes, eliminando muchos de los requisitos complejos que caracterizaban al sistema tributario tradicional.
Pueden acceder a este régimen tanto personas físicas como morales que cumplan con los criterios establecidos. Las personas físicas incluyen empresarios individuales, profesionistas independientes y prestadores de servicios. Las personas morales abarcan pequeñas y medianas empresas que no excedan los límites de ingresos establecidos.
El principal requisito es no exceder los 3.5 millones de pesos anuales en ingresos totales. Este límite aplica tanto para personas físicas como morales y se calcula considerando todos los ingresos gravables del contribuyente durante el ejercicio fiscal.
Tipos de contribuyentes permitidos
Pueden ingresar al RESICO:
Restricciones y exclusiones
No pueden acceder aquellos contribuyentes que:
Para inscribirse, es necesario acceder al portal del SAT con tu RFC y contraseña. Una vez dentro, busca la opción "Cambio de régimen fiscal" y selecciona RESICO como tu nuevo régimen. El sistema te guiará a través de un proceso de validación automática.
Es importante realizar este cambio durante los plazos establecidos por el SAT, generalmente durante enero de cada año o al momento de iniciar actividades económicas.
Documentos necesarios
El proceso requiere únicamente:
Los contribuyentes deben realizar pagos mensuales de ISR calculados sobre una base simplificada. Adicionalmente, presentan una declaración anual donde se determina el impuesto definitivo del ejercicio.
Las tasas de ISR varían según el nivel de ingresos:
Cuando los contribuyentes actúen como retenedores, deben aplicar las tasas de retención correspondientes según la naturaleza del pago y el régimen del beneficiario.
El RESICO ofrece mayor simplicidad administrativa comparado con el régimen general, pero menos flexibilidad en deducciones. Frente al RIF (ya eliminado), presenta tasas más competitivas pero con mayor límite de ingresos.
RESICO:
Régimen General:
Tabla comparativa
Una de las principales ventajas es la significativa reducción en trámites y procedimientos administrativos. Los contribuyentes pueden enfocarse más en su actividad económica que en cumplir con obligaciones fiscales complejas.
Las tasas reducidas representan un ahorro considerable en el pago de impuestos, especialmente para contribuyentes con ingresos dentro del rango medio del límite establecido.
Al contar con tasas preferenciales, la necesidad de comprobar deducciones disminuye considerablemente, simplificando la contabilidad y reduciendo costos de cumplimiento.
Los contribuyentes deben emitir comprobantes fiscales digitales por todos sus ingresos y mantener un registro adecuado de sus operaciones. La facturación electrónica sigue siendo obligatoria.
Además de los pagos mensuales, deben presentar declaración anual antes del 30 de abril del año siguiente. Esta declaración determina el impuesto definitivo del ejercicio.
Todas las comunicaciones oficiales con el SAT se realizan a través del buzón tributario, por lo que es fundamental mantenerlo activo y revisarlo regularmente.
Caso con ingresos de $1,000,000 al año
Un contribuyente con ingresos anuales de un millón de pesos pagaría únicamente el 1% de ISR, es decir, $10,000 pesos anuales. Este cálculo no considera otros impuestos que pudieran aplicar según la actividad.
El mismo contribuyente en régimen general, sin considerar deducciones, pagaría aproximadamente $300,000 pesos anuales (30% de tasa máxima), evidenciando el ahorro significativo que ofrece el RESICO.
Existen diversas herramientas que facilitan el cumplimiento fiscal:
La implementación de sistemas automatizados permite mantener un control eficiente de ingresos, gastos y obligaciones fiscales, reduciendo errores y optimizando tiempo.
El Régimen Simplificado de Confianza (RESICO) es una alternativa inteligente para personas físicas y morales que buscan reducir su carga administrativa y fiscal sin perder el control ni el cumplimiento ante el SAT.
Con tasas preferenciales, requisitos accesibles y una gestión más eficiente, este régimen permite enfocar los esfuerzos en el crecimiento del negocio en lugar de procesos contables complejos. Evaluar si tu empresa califica para el RESICO puede marcar una diferencia clave en tu rentabilidad y sostenibilidad financiera.
Explora nuestro blog financiero en metricas.mx donde encontrarás guías detalladas, casos prácticos y consejos de expertos para optimizar y llevar tu empresa a otro nivel.